The Secret Garden.
Las obras de esta colección son el resultado de algunas de las preguntas que formulé al tríptico "El Jardin de las Delicias" de "El Bosco" y del que espero algún día su respuesta.
The Secret Garden.
Nuevas Miradas.
Manolo Pardo cree en una verdad visual, para él lo importante no es una pintura abstracta o una pintura figurativa, sino hacer una pintura verdadera y no una pintura falsa.
Nuevas Miradas
Tres horas en el Museo del prado.
La pintura de Manolo Pardo, como la mejor de las literaturas, sugiere más que expresa; es más connotativa que corpórea. Se mueve más en los dominios de lo sublime que en el reino de lo tangible.
Tres horas en el Museo del Prado.
Enigma de la Contemplación
Manolo Pardo al introducir el espacio real en el pictórico, nos convierte en espectador de espectadores. Nos hace contempladores de la contemplación y de las historias únicas vividas por cada personaje.
Enigma de la contemplación
Sueños del agua
…Y el agua. No agua para todos, sino de todos. Somos el agua que fluye en el tiempo… sin tiempo. El agua que nos destruye, el agua que nos nutre.
Sueños del agua
Oasis Abierto.
Pardo se resiste a entregarse a una sola técnica, a un solo concepto de creación. Flirtea con óxidos, gouaches, óleos y maderas; le acompañan multitud de aromas, texturas y materiales, supervisados por la sonora presencia de Bach, Beethoven, y demás genios de la música. Durante el viaje ha encontrado su propio espacio interno, su OASIS ABIERTO a la intimidad con la creación.
Oasis abierto
Autopsia de una palmera
El Aura que perdura.
Si Rimbaud utiliza su maravilloso y díscolo don poético para componer su Vénus Anadyoméne, Manolo Pardo se hace eco, a la forma irracional del artista (el pintor piensa directamente en pintura, podemos decir parafraseando a Wilde), del gran poeta de las "iluminaciones" y su tema, y ambos nos resultan formalmente clásicos y tambien absolutamente modernos.
El Aura que perdura
Civitas
En estas obras de Manolo Pardo se puede apreciar algo más que la “urbs”: se puede sentir la “civitas”. La dilución de los elementos que nos hacen palpar el sentimiento del ser y del espacio urbano. En esta interpretación plástica hay una superación artística y conceptual que va más allá de fotografiar edificios o retratar individuos.